Surgió de la adaptación de las representaciones dramáticas griegas; donde además de la comedia y la tragedia, existían también: los actores que dialogaban sobre temas jocosos y burlescos, los que cubrían el rostro con máscaras, los mimos, y la pantomima, pieza dramática que personifica danza y mímica representada por un solo actor.
Su origen de películas latinas
El teatro es el género literario más antiguo de la literatura romana. Tiene su origen en Grecia y está ligado al culto que los griegos rendían al dios Dionisio. Aunque, con respecto a los romanos, hubo el detalle de que a pesar de que ellos elegían otro tipo de espectáculos, tuvieron muy en cuenta la tradición de los griegos.
Sus representaciones
204 a.C. LIVIO ANDRÓNICO representa por primera vez en Roma una obra dramática que era imitación del teatro griego. Antes de esta producción, los romanos habían conocido representaciones como las danzas etruscas; versos improvisados de maneras mordaces en las que la danza acompañaba al canto, que se tornaron cada vez más sarcásticos y se introdujeron en los cantos nupciales. En las representaciones se acostumbraba a usar disfraces; permitían una mayor libertad a los actores para su desenvolvimiento e improvisación.
Sobre mejores películas latinas
Algunas se remontan en una base histórica real; otras resultan ser ficciones adaptadas de novelas o de leyendas, sus películas tienen algún componente religioso. Aunque, no estén directamente relacionadas a la capital italiana, siempre hacen connotación a Roma. De las que se puede entre las mejores se encuentran El rey Arturo (2004), Espartaco (1960), Cleopatra (1963), Aníbal (1960), a caída del imperio romano (1964) entre otras que han sido recreadas en el más impresionante imperio de la historia; con el fin de siempre crear nuevas formas para mantener a su público, y atraer a nuevos espectadores.