La impotencia también conocida como la disfunción eréctil, es una enfermedad que se produce cuando el hombre no puede mantener la erección un 50% de los intentos que tiene en el coito, o cuando sufre interrupciones de estás erecciones.
Causas de la impotencia
Generalmente la impotencia es generada por problemas neurológicos, uso de inadecuado de fármacos, extrañas anomalías en el pene, o trastornos psicológicos que disminuyen la excitación sexual.
Muchas veces la impotencia es producida por causas físicas, ya que está incapacidad la comienzan a sufrir los hombres que van pisando ciertas edades adultas, mayores a los 65 años. Más de la mitad de los hombres que tienen más de 65 años son impotentes, y 3/4 de los hombres de 80 años padecen está incapacidad.
Diagnóstico de la impotencia
El médico debe hablar con el paciente y preguntarle si el mismo es capaz de mantener una erección completa para mantener una relación sexual, también si el paciente tiene erecciones por la noche o al despertarse.
Conocer la historia clínica del afectado es vital, ya que el médico debe conocer si el paciente ha sido intervenido quirúrgicamente de la pelvis, el recto o la próstata. El especialista debe conocer si el paciente sufre trastornos psicológicos, ansiedad o depresión antes o después de sufrir la importancia.
Ciertos fármacos recomendados por los especialistas pueden dar cura a esta afección, pero su eficacia no es 100% efectiva y no se aseguran los resultados, algunos de estos fármacos son inyecciones que se aplican directamente en el tejido cavernoso del pene.