La natación es uno de los deportes con los que más calorías se queman, ya que se utilizan todos los músculos del cuerpo. Normalmente se queman entre 400 y 500 calorías, pero siguiendo estos trucos podrás aumentar es te número.
Controla tus pulsaciones, de manera que se mantengan en un 80% de tu máximo aproximadamente. Este porcentaje es el más recomendado para aprovechar al máximo los beneficios del ejercicio físico. Para cada 10 largos y mide tus pulsaciones durante 15 segundos, multiplicando este número por cuatro para saber las pulsaciones por minuto.
Usa material de natación. Tabla, aletas… todo tipo de material te puede servir. Además de conseguir quemar más calorías, esto te servirá para tonificar los brazos y las piernas, puesto que estarás centrándote en uno grupo muscular en lugar de entrenar todo el cuerpo.
Varía todo lo que puedas. Distintos tipos de natación, cambios de ritmo… siempre manteniéndote en las pulsaciones que hemos dicho arriba.
Esprinta. De vez en cuando nada tan rápido como te permita tu cuerpo, eso sí, descansando cuando termines. Si no descansas, tu rendimiento disminuirá y el entrenamiento será menos efectivo.