Pasar de pareja a padres es algo hermoso pero asimismo incierto y complejo pues estamos hablando de un cambio total de vida que no siempre sale como se espera. Afrontar esta nueva etapa desde el amor y el apoyo mutuo hace parte del secreto para que las nuevas responsabilidades y la falta de tiempo para compartir tal y como estaban acostumbrados no influya de forma negativa en el hogar.
Ahora bien, una vez se conoce la noticia del embarazo los padres inician los preparativos para la llegada del bebé y para ello visitan tiendas y acceden a sitios como original baby con la intención de seleccionar lo más lindo y adecuado para el bienestar de su pequeño, pero muchas veces se olvidan de dialogar sobre como van a enfrentar a nivel de pareja este emocionante nuevo rumbo.
Ser feliz en pareja y disfrutar de los hijos
Lo cierto es que las dos cosas pueden lograrse pero hay que trabajar un poco para conseguirlo, es así como los inconvenientes pueden iniciar por ejemplo por el cansancio acumulado que genera cuidar del bebé día y noche, esto por supuesto genera tensión y de no existir la comunicación y la colaboración adecuadas puede convertirse en algo que aleja a la pareja totalmente.
Por otro lado está el tema de ponerse de acuerdo en el tipo de crianza, en los horarios y todo lo que implica guiar la vida de ese pequeño ser que depende de ambos, en este sentido ser honestos al expresarse y estar dispuestos a ceder un poco pueden ser buenos recursos para establecer acuerdos con los que ambos se sientan bien.
No está bien que uno de los padres asuma toda la responsabilidad de los cuidados, lo ideal seria actuar como un equipo incluso con relevos para que cada quien pueda tener un tiempo para si mismo, está bien pedir ayuda y es correcto que los padres ocasionalmente se tomen una noche libre fuera de casa para reencontrarse y vivir ese amor romántico que por la rutina va quedando relegado.
Algunos hombres o las mismas mujeres pueden llegar a sentirse algo desplazados con la llegada del nuevo integrante al seno familiar por lo que deben ponerse de acuerdo en no dejar de ser afectivos entre si y aunque el bebé es un gran regalo e inspira desbordante amor y ternura este no debe «sustituir» a la pareja y nadie debe perder esa atención y trato especial que siempre ha tenido.