Es bastante común escuchar entre las personas que luego de tomar una siesta se despiertan como un zombi o más cansados, lo cual por supuesto es bastante contradictorio. En ese orden de ideas, los estudios han identificado que la clave para evitar este efecto que el cuerpo radica en la duración de las siesta.
¿Cómo evitar despertar como un zombi luego de una siesta?
Sin lugar a dudas no hay nada mejor que disfrutar de una siesta, pues un descanso en medio del día es un método bastante eficaz para recargar un poco de energía y así rendir mejor.
El inconveniente principal con este concepto tiene que ver con excederse, es decir, romper con los límites y terminar por dormir varias horas cuando en realidad lo que se buscaba era una siesta. En ese sentido, es probable que como consecuencia de una siesta usted se pueda despertar en horas de la noche.
Aunque suene extraño, una siesta puede ir de la mano con el café. Claro, la cafeína puede interferir en la conciliación del sueño, pero es un truco con el que se puede hacer de la siesta una situación un poco más corta.
Tenga en cuenta que la cafeína va a ser absorbida muy rápido, alcanzando su punto máximo en unos 20 o 30 minutos. Será en ese momento en donde el cuerpo ingresará a un estado de alerta y por lo tanto esta es la estrategia para hacer una siesta más reconfortante y beneficiosa para el cuerpo y mente.