Se habla de átomo cuando se está haciendo referencia a la partícula más pequeña de un elemento químico, la cual a pesar de dividirse en ningún momento pierde las propiedades de dicho elemento. Considerando que corresponden a los bloques básicos de la materia, es posible indicar que, aunque todos los átomos están conformados por las mismas piezas básicas suelen organizarse de maneras distintas para así dar lugar a elementos únicos.
En cuanto a la estructura del átomo como tal, su centro focal es el núcleo, pero también se distinguen otras partes que veremos con más detalle a continuación.
Las partes del átomo
Las partículas subatómicas que componen el átomo son las siguientes:
- El protón: además de sobresalir por su carga positiva, son unas 1.836 veces más pesados que los electrones. Se localizan justo en el centro del átomo, es decir en el núcleo; como dato curioso, el átomo de hidrógeno se distingue sobremanera debido a que dispone solamente de un protón y de ningún neutrón en su núcleo.
- Electrones: es una partícula de carga negativa que se dispone y gira extraordinariamente rápido alrededor de la parte más externa del núcleo. Se distinguen por ser las partes más ligeras y pequeñas.
- Neutrones: suelen pesar casi que lo mismo que los protones, su característica más relevante consiste en estar libre de carga eléctrica.
En cuanto a partículas mucho más pequeñas, vale la pena destacar el Quark y el Neutrino, el primero compuesto de protones y neutrones mientras que el segundo, de reacciones nucleares.