En 1820, el matemático y físico francés Jean-Baptiste Joseph Fourier se inscribió para siempre en la historia de la humanidad al haber sido la primer persona en proporcionar una explicación científica sobre el efecto invernadero, esto gracias a que de acuerdo a sus cálculos puedo establecer que un objeto del tamaño de la Tierra y con su misma distancia del Sol, debe ser considerablemente más frío de como es en realidad la Tierra calentada solo por los efectos de la radiación solar entrante.
Considerando que sin el efecto invernadero la vida simplemente no podría existir de la manera en la que la conocemos, vale la pena profundizar en este concepto para presentarlo de la manera más comprensible posible.
El efecto invernadero
Podemos explicarlo como la elevación de la temperatura del planeta que se genera por la acción de un determinado grupo de gases, muchos de estos producidos por el mismo hombre, estos al absorber la radiación infrarroja consiguen que se caliente tanto la superficie de la Tierra como la parte inferior de la capa atmosférica; si las cosas no sucedieran de esta manera, nuestro planeta podría llegar a registrar temperaturas de hasta -88 grados.
Entre los llamados gases invernadero podemos encontrar el vapor de agua, dióxido de carbono, ozono, metano, los óxidos de nitrógeno y los Clorofluorocarburos. Cabe señalar que una actividad como la deforestación lleva a que la atmósfera pierda su capacidad regenerativa y en consecuencia disminuya la eliminación de dióxido de carbono que es a su vez el causante del calentamiento excesivo.