Si hay un signo vital indispensable para medir cuál es tu estado de salud, ese es la frecuencia cardíaca. El cual, tal y como su nombre indica, tiene el objetivo de medir cuántas veces por minuto se contrae un corazón.
No obstante, pese a lo sencillo que resulta el concepto, en la práctica puede ser un poco confuso, debido a que no es fácil establecer un “valor normal” de frecuencia cardíaca, dado que ésta puede variar considerablemente a causa de múltiples factores, como lo es la actividad física, ciertas emociones o la sensación de peligro inminente.
Las pulsaciones normales en la frecuencia cardíaca
Ahora bien, pese a lo antes dicho, existen ciertas pulsaciones normales en reposo a utilizar en la medicina para valorar la frecuencia cardíaca de una persona y si ésta no es un signo de algún problema de salud latente.
Estas se manejan entre 50 y 100 pulsaciones cada minuto y bajo un estado de relajación. Cabe mencionar que tener una frecuencia cardíaca que oscile entre estos valores no es garante de que no se tiene ningún tipo de enfermedad, simplemente se trata de un signo que puede ayudar a identificar si se tiene alguna.
Importancia
La importancia de la frecuencia cardíaca radica en que para que el organismo funcione es necesario que el corazón sea capaz de bombear sangre a cada órgano con una frecuencia adecuada, así como también con una óptima presión.